Warning: strpos() expects parameter 1 to be string, array given in /home/site/wwwroot/wp-content/themes/twentynineteen-child/functions.php on line 163
Se habla de comorbilidad cuando se refiere a que, en una persona con discapacidad mental, se dan dos o más enfermedades mentales. Esto, sobre todo en la actualidad, es un tema muy frecuente. Igualmente, es habitual que se den juntos problemas físicos (complementados por la nutrición clínica) con problemas mentales; esto último es más común en personas de edad avanzada.
Contexto
En el estudio realizado por Geerling y sus colaboradores en el año 2000, se demostró que los problemas de salud física no sólo coexisten con trastornos mentales, como la depresión, sino que también pueden predecir el inicio y la persistencia de ésta.
En un estudio realizado en el año de 1994, por Kessler y sus colaboradores en los EEUU, se demostró que la comorbilidad, es decir la presencia de dos o más trastornos simultáneos en un mismo individuo, afectaba al 79% de todas las personas enfermas. Ello implica que solo en un 21% de personas había una sola enfermedad mental. El resto tenía dos o más juntas.
Ese mismo estudio por Zimmerman y sus colaboradores en el 2000 demuestran que es muy frecuente el que la depresión y la ansiedad se den juntas. De acuerdo a este estudio, se pudo observar en la mitad de los individuos que la padecen. Hay quienes asocian pánico con fobias, y en especial agorafobia. Igualmente, obsesiones con depresión. Se sabe que las obsesiones implican mucha ansiedad que lleva al paciente a realizar rituales para superarla. Lo anterior, el ritual, calma la ansiedad, pero lamentablemente vuelve la idea sobrevalorada, fija, o parasitaria, y se instala de nuevo la ansiedad.
Hay evidencias de depresión en los esquizofrénicos, que los lleva al suicidio.
Un hecho incontrovertible es la presencia de comorbilidad en consumidores de sustancias toxicas legales o no. Un estudio realizado por Gossop y sus colaboradores en el año 1998 demostró que, entre los alcohólicos y los drogodependientes, un 30% y el 90% padecen un trastorno doble.
El estudio de Rachliesel y sus colaboradores realizado en 1999 registra un 65% de trastornos por consumo de alcohol en personas que acuden a los servicios de salud mental. Igualmente se han encontrado un 12% a 50% de comorbilidad en los pacientes esquizofrénicos. Se sabe que este problema hace más difícil el tratamiento y agrava el costo de la atención. Hay mayores dificultades para su recuperación y rehabilitación. Ello es señal de mayor discapacidad y mayor carga para la familia.
Concepto
Fhernanda Rojas López indica que el término tiene otra connotación en epidemiologia psiquiátrica, refiriéndose a riesgo relativo. Esto es que, si un paciente presenta una enfermedad índice, tiene probabilidad de sufrir otra enfermedad.
En 1974 Feinstein y Kapplan introducen tres tipos de comorbilidad que permiten clarificar un poco más este concepto:
- Patogénica: se da cuando una enfermedad da origen a complicaciones o a otra enfermedad, existiendo una relación etiológica (causas de un enfermedad) entre ambas. Como un ejemplo en el campo de la psiquiatría: en una enfermedad crónica incapacitante como es la esquizofrenia, se podría desarrollar una depresión secundaria.
- Diagnóstica: cuando dos enfermedades diferentes producen síntomas clínicos comunes. Un ejemplo de este caso de comorbilidad es cuando un paciente con depresión y ansiedad, muestra dificultades en la capacidad de concentración.
- Pronóstica: se aprecia cuando determinadas enfermedades predisponen al paciente a desarrollar otras. Por ejemplo, en un paciente que presenta depresión y al mismo tiempo trastorno de pánico, estaría bajo un riesgo aumentado de dependencia etílica.
Comorbilidad de los ejes I y II
Siempre ha existido gran controversia en cuanto a lo aplicable y adecuado de la clasificación de los trastornos de la personalidad propuesta actualmente por el DSM-IV y el CIE-10.
Aunque se ha intentado una aproximación de criterios para los trastornos entre estas dos clasificaciones, la CIE-10 tiende a ser menos directiva en el momento del diagnóstico. Así la comorbilidad está muy presente o mejor, más fomentada por el DSM-IV ya que la CIE- 10 tiene tendencia a favorecer un diagnostico único. Es precisamente por esa arbitrariedad de los sistemas DSM que la mayoría de escalas evaluativas de los TP se basan en estos. Se encontró así con mayor frecuencia más de un diagnóstico para cada persona. Esta multiplicidad de diagnósticos, específicamente del eje II tiene dos implicaciones en la investigación:
- Se anticipa una idea de la gravedad de la alteración del sujeto basada en el número de diagnósticos que presenta.
- Se complica la interpretación de estos estudios que generalmente tienden a agrupar a un paciente en categorías diagnosticas únicas.
Así, el DSM-IV presenta diagnósticos comórbidos para todos los trastornos de la personalidad. Son los más frecuentemente comórbidos el trastorno límite y el trastorno por evitación, le siguen el histriónico y el narcisista. Se habla de un 70% de pacientes con trastornos de personalidad que presentan más de uno, oscilando entre 2, 3 o 4 trastornos adicionales.
Según estudios la comorbilidad más significativa se presenta entre los siguientes trastornos:
- Narcisista con antisocial.
- Histriónico con pasivo-agresivo.
- Por evitación con esquizotípico y por dependencia.
- Límite con histriónico.
Trastornos de la personalidad y estado del ánimo
Es frecuente la asociación entre el trastorno límite de la personalidad y la depresión. En el caso de pacientes con distimia (trastorno afectivo crónico de carácter depresivo leve) parece ser más frecuente la presencia de algún trastorno de la personalidad que en otros pacientes con trastornos depresivos. Siendo los más frecuentes el trastorno límite, el histriónico y por evitación. Según diferentes autores, al existir un TP comórbido, el curso y la respuesta al tratamiento en un paciente depresivo muestran:
- La depresión se inicia a menor edad.
- Aumento en las conductas suicidas.
- Respuesta baja al tratamiento.
- Mayor riesgo de recaídas.
Otros casos de comorbilidad relacionados a los trastornos de la personalidad: en relación con trastornos psicóticos, por ejemplo el trastorno de la personalidad esquizotípico y el antisocial, están muy ligados a la esquizofrenia. En pacientes con trastornos de ansiedad y TP se identifica una peor respuesta a tratamientos, peor funcionamiento global y una marcada tendencia a recaídas en cuanto a los trastornos de la personalidad y la relación con trastornos por el uso de sustancias, existe una gran discusión.
¿Cuál es la causa y consecuencia?
Por ejemplo, en el caso de la dependencia del alcohol, se ha encontrado que hasta un 64% de los pacientes presentan un trastorno de la personalidad, entre los más frecuentes el trastorno límite y antisocial.
En trastornos de la alimentación parece frecuente el trastorno límite de la personalidad, en el caso de la bulimia, estudios han descrito asociación de esta con trastornos como histriónico, esquizoide, antisocial, esquizotípico. La anorexia se asocia más al trastorno por evitación, produciéndose una mayor cronicidad.
En cuanto a los trastornos de la infancia, estos se pueden considerar como las primeras manifestaciones de posteriores trastornos de personalidad. Es el caso de los trastornos de comportamiento que pueden evolucionar hasta convertirse en un trastorno antisocial. Un 70% de adolescentes con trastorno de la conducta, presentan algún trastorno de la personalidad siendo los más frecuentes: Trastorno pasivo-agresivo y el histriónico.
Profundización en los trastornos psicológicos
La realidad de los trastornos mentales es que, en la actualidad, se representan cada vez más en el comportamiento alimentario. Así mismo, en una sociedad donde los problemas relacionados con la alimentación están a la orden del día, es crucial que los profesionales de la nutrición se capaciten por medio de instituciones reconocidas como lo es TECH Universidad Tecnológica.
Para hacer frente a las deficiencias que puedan presentar los pacientes por diversas enfermedades, este Máster en Nutrición Deportiva y el Máster en Nutrición Clínica ofrece soluciones a los problemas de salud de cada individuo por medio de enfoques nutricionales. Sin embargo, se le debe dar una mirada más detenida al Máster en Intervención Psicológica en Trastornos de la Conducta Alimentaria debido a la frecuencia con la que se están presentando los casos en la actualidad.