Warning: strpos() expects parameter 1 to be string, array given in /home/site/wwwroot/wp-content/themes/twentynineteen-child/functions.php on line 163

En el desarrollo social y moral los agentes de socialización se encargan de transmitir modelos y pautas de comportamiento; son muy diversos y actúan en función de una serie de normas y de conductas alrededor de las que suele producirse un consenso entre los diferentes ámbitos de la sociedad. Se entiende la socialización como un proceso dinámico y permanente de adecuación de lo individual a lo social (Pallarés, 2014).

La familia, la escuela, el grupo de iguales y los medios de comunicación se encuentran implicados en enseñar a los adolescentes los elementos de sus culturas. La familia, desde siempre, es el primer medio social con el que se encuentran los niños y niñas y constituye el primer grupo de referencia. Resulta lógico que quien nace en una familia, lo primero que imite sea a sus padres. Es de ellos de quienes aprende el lenguaje, los modos y costumbres de vida.

La escuela también enseña valores y actitudes; por ejemplo, la conformidad con las reglas y regulaciones es un aprendizaje que se da fundamentalmente en esta institución. La red social de amigos y compañeros de colegio aparece como otro agente de socialización. Por último, hoy en día no pueden olvidarse los medios como agentes socializadores. De ellos los adolescentes aprenden también pautas culturales y adquieren experiencias de vida (Téramo, 2006).

La familia

Para definir este concepto es necesario tener en cuenta dos perspectivas. En primer lugar, la sistémica, que considera a la familia como un conjunto estructurado de personas en interacción y la evolutiva. Esta define familia como un grupo intergeneracional de personas unidas por vínculos de sangre y parentesco, unidos también por vínculos legales y vínculos afectivos; esto con una historia y un proyecto de vida compartido de larga duración.

Estas dos perspectivas ayudan a entender qué es la familia. Si se considera solo la perspectiva sistémica se dejan de lado a las familias adoptivas, monoparentales. etc. Bertalanffy formuló en 1968 la Teoría General de Sistemas (TGS) con la finalidad de dar explicación a los principios sobre la organización de muchos fenómenos naturales. En la actualidad se ha convertido en el modelo predominante en los estudios de familia.

Incluye elementos de teorías como el constructivismo, la Gestalt, el psicoanálisis, el modelo cognitivocomportamental, la teoría de aprendizaje social y la psicología del desarrollo. El modelo sistémico, que entiende la familia como un sistema, explica el comportamiento y la evolución de las familias (Espinal, Gimeno y González, 2006). Desde esta perspectiva, la familia se define como un conjunto organizado e interdependiente de personas en constante interacción. Esta se regula por unas reglas y por funciones dinámicas que existen entre sí y con el exterior. Las funciones principales de la familia son: socialización, desarrollo personal y cohesión familiar.

Socialización

La familia aparece como el elemento clave en el proceso de socialización, al ser considerada como un agente primario. Lo anterior, porque su influencia se produce desde la infancia, aunque no es el único agente de socialización, ya que también socializan la escuela, los amigos, los grupos formales e informales y, sobre todo hoy, los medios de comunicación. La función socializadora de la familia se mantiene y de modo bastante estable, durante largos períodos de tiempo.

La familia es la que desarrolla en la persona un sistema de valores, actitudes, creencias, referidos a los aspectos más importantes de la vida; trabajo, sociedad, cultura, amistad, etc. En definitiva, es la que contribuye decisivamente a crear un modo de percibir la realidad física y social, además de un modo de percibirse a sí mismo.

El proceso se lleva a cabo mediante la implicación de padres, hermanos, abuelos, etc.; a través de estrategias diversas como: el modelado, la instrucción directa, la experiencia compartida, en todas ellas se da una alta implicación afectivo-emocional.

Desarrollo personal y social de todos, en particular de los niños

La naturaleza humana hace que el recién nacido sea un individuo incapaz de sobrevivir por sí solo y hace de su período de crianza el más largo y el más intenso de cualquier especie. Los cuidados que plantea la crianza deben cubrir además, otros objetivos como el de proporcionar al bebé un sentimiento de seguridad básica.

Mantener la unidad/cohesión familiar

La familia, en cuanto sistema, tiene una tendencia a mantenerse como grupo, favoreciendo la cohesión de sus miembros y construyendo una identidad familiar que les aproxime entre sí, para mantener el sentido de pertenencia, y que les diferencie del resto.

El adolescente y su familia

El paso de la infancia a la vida adulta es un largo proceso de maduración que se caracteriza porque el individuo se vuelve cada vez más autónomo y responsable, adopta posturas y compromisos personales, y gana cotas de independencia respecto al núcleo familiar. Este proceso, siendo deseable y saludable, es un reto para la familia. Forma parte de las creencias populares sobre la adolescencia, la idea de que las relaciones entre los adolescentes y sus padres son tumultuosas y conflictivas.

Las numerosas investigaciones que se han llevado a cabo sobre este tema arrojan resultados que demuestran que el proceso de adaptación no es tan problemático como a menudo se ha sugerido. De hecho, los expertos estiman que los conflictos solo llegan a deteriorar de forma significativa las relaciones en una proporción que oscila el 5 y el 10%.

Las discusiones más frecuentes giran en torno al manejo del dinero, los horarios y la colaboración en las tareas domésticas, siendo mucho menos frecuentes las disputas por desacuerdos en el sistema de valores, creencias políticas y religiosas, características personales y morales negativas, y por temas como sexualidad y drogas. Las discusiones más intensas se centran en la conducta desconsiderada en casa, características personales y morales negativas y los deberes y el rendimiento académico.

Las contiendas son menos intensas cuando el objeto es el orden de la habitación, la colaboración en las tareas domésticas, la higiene y la apariencia personal. Con las madres discuten más que con los padres, aunque los adolescentes dicen que ellas les comprenden mejor y que con ellas tienen una relación más cercana y positiva que con los padres.

El afecto

Implica la disponibilidad, la capacidad de percibir y responder con coherencia a las demandas del hijo, de crear un clima emocionalmente estable y de mantener formas de interacción armónicas. Un apoyo parental sin fisuras refleja un vínculo seguro y, durante la adolescencia, facilita la capacidad del hijo para negociar su autonomía hacia un funcionamiento adaptativo.

Así, los adolescentes en cuyas familias impera este clima afectivo tienden a mostrar un mejor ajuste y desarrollo psicosocial, niveles más altos de autoestima, confianza en sí mismos, bienestar psicológico, mayor competencia conductual y académica, suelen ser más receptivos a la socialización paterna y presentan en menor medida problemas de conducta que aquellos que han crecido en un clima emocional menos cálido.

El educador como guía para la vida

En los primeros pasos de vida, el ser humano debe ser instruido y, como se dice coloquialmente, la educación comienza desde casa. La familia resulta entonces un factor crucial en la vida del niño, pero, el profesional en educación juega también un papel muy importante. Es el quién dará, de forma objetiva, una instrucción en la forma en la que la sociedad se conforma fuera de las costumbres de su hogar.

TECH Universidad Tecnológica se ha posicionado actualmente como la mayor universidad virtual del mundo. Dentro de la misma se pueden encontrar la Facultad de Educación, dedicada por completo a este ámbito. En ella se desarrollan posgrados como el Máster en enseñanza del latín y cultura clásica y el Máster en Dirección y Gestión de Centros Educativos. Sin embargo, para aquellos profesionales que buscan dominar el campo de la tecnología adaptada al aprendizaje, una de sus mejores opciones será el Máster en la Formación del Profesor de Tecnología e Informática en Educación Secundaria.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *