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El movimiento humano es una secuencia de diferentes posturas y posiciones corporales para un fin determinado. Los desplazamientos y COD no escapan de ello. A lo largo de este tema, se hará referencia al término postura o posición como sinónimos. El primer concepto que se debe entender es que, durante los desplazamientos deportivos, el cuerpo adopta diferentes posiciones que, en función de su eficacia, determinan la calidad de movimiento de un atleta. Por lo tanto, la postura no es un término estático, sino que se le considera un concepto dinámico.

Como se mencionó en temas anteriores, la meta de un programa de desarrollo atlético es mejorar la eficacia del movimiento deportivo, de tal manera que el atleta pueda ser capaz de implementar mejor sus movimientos específicos del deporte (habilidades específicas), su mecánica y, por lo tanto, mejorar sus rendimientos. La eficiencia del movimiento se relaciona con la capacidad del cuerpo para producir y controlar fuerzas.

Un deportista debe ser capaz de controlar la colocación de sus segmentos corporales, en relación unos con otros, y asumir intencionada y habitualmente las mejores posiciones o posturas, para, así, capacitar a sus sistemas neuromusculares y esqueléticos, de tal forma que funcionen y satisfagan los requerimientos que exige la situación. Los desplazamientos en los deportes suceden y necesitan ser controlados en tres dimensiones.

Comprendiendo este concepto, se puede imaginar que el entrenamiento de fuerza con máquinas no pone al deportista en una situación en donde tenga que controlar su postura y dirigir el movimiento. Es por ello que, si se piensa en desarrollar la integridad postural durante los desplazamientos y cambios de dirección, la fuerza en el desarrollo de las habilidades, son fundamentales para lograr adaptaciones positivas.

Postura efectiva

Tradicionalmente, los entrenadores se han centrado en la pregunta: ¿qué hacen los atletas en sus ejercicios de desarrollo atlético? El desarrollo de una adecuada mecánica postural requiere centrarse en cómo estos realizan los movimientos. Se puede definir a la postura como el orden relativo de las partes del cuerpo. Bajo tales condiciones, los músculos funcionarán con mayor eficacia.

La mala postura es la defectuosa relación entre las diferentes partes del cuerpo. Esta definición muestra la importancia de hacer hincapié sobre la integridad postural, es decir, la colocación correcta de las articulaciones, en relación de unas con otras, en un contexto dinámico. La integridad postural es la base de la eficacia de los movimientos, ya que la posición articular optimiza la biomecánica del sistema músculo-esquelético.

Esto sucede gracias a que la posición articular determina la función muscular. Es decir, el patrón de reclutamiento muscular durante una habilidad (shuffle, crossover, aceleración, etc.) está condicionado por las posiciones relativas de los segmentos óseos. Cualquier gesto deportivo estará condicionado por la posición previa de los segmentos corporales (articulaciones). La postura es el telón de fondo de todas las acciones deportivas.

Postura y movilidad

Es necesario entender a la postura como una combinación de estructura, alineación, movilidad, coordinación e incluso acondicionamiento físico y mental. Durante los desplazamientos y cambios de dirección, los atletas se mueven a través de un amplio rango articular y a grandes velocidades. Sintéticamente se podría definir a la flexibilidad como la capacidad de doblar un cuerpo con facilidad y, a la movilidad, como la capacidad del cuerpo para moverse y utilizar controladamente todos los grados de libertad que posee un núcleo articular.

Durante los desplazamientos y COD, los atletas adoptan diferentes posiciones articulares las cuales están condicionadas por la movilidad y el control motor del atleta en esos rangos articulares. Como prerrequisito para mejorar la calidad de movimiento de los atletas, la movilidad es un pilar fundamental. Por ejemplo, si un atleta no puede adoptar determinadas posiciones articulares en un wall drill, difícilmente podrá, en situaciones dinámicas, conseguir esos ángulos.

Postura y core

El concepto de core juega un papel fundamental para dar soporte al movimiento y, en particular, a los desplazamientos y cambios de dirección. Una de las funciones principales del core es la de ser un conductor de fuerzas. Los músculos posturales han de ser capaces de co-actuar para proporcionar una plataforma estable en la que los músculos productores de potencia puedan movilizar las articulaciones y, además, desarrollar y expresar las grandes fuerzas. La estabilidad (tanto central, como de la cadera) es crucial para cualquier movimiento atlético, porque asegura que el cuerpo pueda moverse con la máxima eficiencia.

Cuando se interrumpe la estabilidad, a menudo, resultan patrones de movimiento disfuncionales y pérdida de la energía elástica. La postura es la base para mejorar la estabilidad. Debido a que el movimiento de las extremidades se origina, en gran medida, en el núcleo del cuerpo, correr con el núcleo estabilizado y en la alineación adecuada, normalmente asegura movimientos óptimos de las extremidades.

Cuando el cuerpo carece de estabilidad o de la alineación postural adecuada, reacciona para preservar la estabilidad. Estas reacciones tienden a ser muy perjudiciales para el rendimiento en los desplazamientos. La pelvis y la rigidez del tobillo son de particular importancia en los desplazamientos, tanto desde el punto de vista del rendimiento, como desde el punto de vista de la prevención de lesiones.

Cuando la postura es correcta, la rigidez de las extremidades inferiores aumentará naturalmente, porque hay más tiempo para colocarse correctamente para absorber la fuerza. El trabajo dinámico del tendón de Aquiles y pantorrillas aumenta la elasticidad y permite una mejor absorción y producción de la fuerza. Esto da como resultado un menor tiempo de contacto con el suelo y un mayor desplazamiento horizontal.

Postura y centro de presión

El concepto de centro de presión (magnitud de la fuerza dividida por el área sobre la cual dicha fuerza se distribuye) es un concepto clave para entender cómo se distribuyen las fuerzas, especialmente las de un impacto o las de reacción al suelo, como ocurre en los desplazamientos y COD. Este concepto de entrenamiento es importante porque permite al deportista experimentar y entender la presión que puede sentir en una región de la planta del pie para determinar el resultado de un patrón motor.

Todos los desplazamientos implican entender esta idea, que es, básicamente, que el atleta entienda con qué región del pie y en qué dirección debe empujar en función del destino al cual se quiere desplaza. Estas habilidades implican realizar una acción de empuje al suelo con diferentes regiones del pie.

Análisis biomecánico de una postura eficiente

La posición atlética es la más efectiva para transmitir fuerzas de reacción al suelo. Es común para todos los deportes y preparatoria para movimientos en cualquier dirección. Los factores clave de la posición atlética son:

  • Posición del cuerpo: semiflexión.
  • Posición de las piernas: se sigue la regla de las caderas por “dentro” de las rodillas, rodillas por “dentro” de los tobillos. Las tibias tienen que estar en un ángulo positivo (dorsiflexión de tobillos).
  • Peso del cuerpo: debe estar distribuido en ambas piernas y en el tercio medio anterior del pie (evitar apoyarse sobre talones).
  • Posición de los brazos: a los lados del cuerpo
  • Activación: mantener una activación del core y los miembros inferiores (estado de pre-tensión muscular) que promueva la rápida respuesta a cualquier estímulo.

El entrenador personal profesional

Es necesario que cuando una persona busque cambiar su estilo de vida a uno más saludable existan figuras profesionales acompañándolo en este proceso. Así como sucede con la alimentación y el nutricionista, sucede de igual manera para el entrenador personal y el deporte o la actividad física. Por esta razón, esta figura profesional se ha convertido en una de las más necesarias en nuestros estilos de vida.

TECH Universidad Tecnológica basa sus programas educativos en las necesidades sociales que aparecen cada día. En el caso de su Facultad de Ciencias del Deporte, se pueden hallar especializaciones tales como el Máster en Prevención y Readaptación de Lesiones Deportivas y el Máster en Medicina Hiperbárica en la Actividad Física y en el Deporte. Sin embargo, para aquellos profesionales que buscan complementar sus conocimientos en el área del entrenamiento de fuerza, no cabe duda que su mejor opción educativa será el Máster en Entrenamiento y Programación de la Fuerza para el Rendimiento Deportivo.

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