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Una de las preocupaciones más acusadas en la lucha contra el cambio climático por parte de los países involucrados es fomentar y favorecer el desarrollo económico e industrial en las regiones más afectadas, así como la integración tecnológica en los países ya desarrollados. Esto, empleando vías alternativas que permitan continuar creciendo a nivel económico, político y social de forma sostenible. El objetivo principal de la energía y el desarrollo sostenible a nivel internacional es impedir a largo plazo la reincidencia en los efectos más desfavorables referentes al calentamiento global y el cambio climático.
Es decir, la filosofía mantenida a nivel internacional no es solo frenar las actividades perjudiciales, si no enfocar una política homogénea que permita continuar desarrollando las actividades industriales y económicas desde una visión más pragmática y favorable.
Para alcanzar dicho objetivo, tal y como se ha mencionado anteriormente, los factores más determinantes son tanto la tecnología como las telecomunicaciones. Ambos elementos sustentan la digitalización y la transformación cultural del sector energético, sentando las bases de la sostenibilidad como herramienta clave para el futuro. Gracias a la implicación de dichos factores, ha sido posible el desarrollo de mecanismos flexibles que permiten incremental la versatilidad de las emisiones y de la protección ambiental de forma equilibrada.
Mercados de carbono
Se trata de un instrumento de mercado (implica la participación de demandantes y ofertantes a través de un mecanismo común) a través del cual se persigue la penalización o incentivo económica de las instalaciones que emitan carbono o gases de efecto invernadero (GEI) a la atmósfera. De acuerdo con los estándares internacionales, los mercados de carbono se componen de los siguientes elementos:
Autorización de emisión
Se considera un permiso o justificante concedido por la Administración Publica competente en cada región a través del cual se posibilita a su tenedor a emitir GEI al ambiente. Dichos permisos pueden ser en sociedad o de instalación y, en ningún caso, son transferibles.
Derecho de emisión
Es el bono a través del cual se participa en cada mercado. Dicho derecho está formado por una cantidad de emisiones permitidas y una tasa correspondiente a la misma cantidad. A diferencia de la autorización, si es transferible, pudiéndose comerciar con el mismo (venta o compra), favoreciendo la reducción de emisiones a nivel económico. Es decir, si las emisiones son inferiores a las establecidas en el derecho adquirido, el restante puede ser vendido a través del mercado.
Techo de emisiones
Máximo volumen de derechos de emisión negociable y, por tanto, marca el objetivo a cumplir a través de las políticas ambientales en el escenario más favorable fijado contra la lucha del cambio climático. Una variación exponencial o brusca del techo de emisiones provoca un encarecimiento de los propios derechos, ya que reduce la oferta de forma proporcional.
Diseño de las reglas de mercado
Basado en la definición genérica de cualquier tipo de mercado de permisos derechos, debe basarse en los siguientes principios:
- Establecimiento del tipo de contaminante o gas a controlar y, por tanto, objeto de la negociación a través del mercado.
- Identificación de los agentes participantes que, en este caso, serán tanto los mayores productores de dichas emisiones como los benefactores de la misma para lograr el equilibrio y la sostenibilidad.
- Definición del ámbito de actuación o de aplicación del propio mercado. Suele ir asociado a espacios vinculantes que mantengan relaciones estratégicas.
- Fijar el máximo volumen negociable, que va asociado al techo de emisiones descrito anteriormente.
- Reglas a través de las cuales se producirá el proceso de asignación de derechos.
Proceso de asignación de derechos
Conlleva la distribución de los diferentes derechos entre las sociedades y/o instalaciones incurridas en los mismos. Depende, en función del organismo gestor responsable del mercado, de mecanismo fijado para la negociación de los derechos. Uno de los más frecuentes es el de subasta, donde se minimiza el importe final según el equilibrio entre la oferta y la demanda.
No obstante, la filosofía mantenida en dichos mercados es clara: las instalaciones que emitan un volumen inferior al comprometido en sus derechos venden ese exceso y, por el contrario, las instalaciones que emitan más de lo adquirido a través de sus derechos autorizados deberán comprar lo que necesiten. Dicho funcionamiento está basado en la ley de la oferta y la demanda. Su motivación se basa en que la negociación está limitada, por lo que no es conveniente un mercado libre y competitivo para mantener el suministro de los servicios de forma estable.
Cumplimiento
Las instalaciones involucradas en los mercados de carbono están obligadas a cumplimentar la documentación solicitada por los organismos reguladores. Para ello, el condicionante crucial que deben cumplir es que la emisión total en un periodo de tiempo determinado debe estar cubierta en equivalencia o defecto (nunca en exceso) por los derechos de emisiones adquiridos. En caso contrario, se aplicarán penalizaciones e impuestos adicionales.
Seguimiento de las emisiones
Para ser capaces de llevar a cabo el análisis de las tareas de cumplimiento, es necesario que las instalaciones afectadas dispongan de los sistemas y/o herramientas requeridas para la medición de las emisiones. Dichos datos serán los empleados para verificar la cobertura de los derechos de emisiones adquiridos.
Registro de derechos
De forma análoga a la medida de las emisiones, se deberá disponer de un registro “contable” de los derechos, así como la evolución de las partes negociantes para poder comprobar todas las transacciones y verificar la disponibilidad suficiente de derechos.
Tipos de políticas aplicables a la energía y el desarrollo sostenible internacional
De acuerdo con los elementos básicos de los que disponen los mercados de carbono (o GEI en general), existen diferentes tipos según la política aplicable sobre los mismos:
- Mercados regulados: Son aquellos de obligado cumplimiento y, por tanto, deben disponer de todos los elementos citados y descritos anteriormente. Son los más extendidos, especialmente en las regiones involucradas en la lucha contra el cambio climático.
- Mercados voluntarios: A diferencia de los anteriores, la participación en los mismos no es requerida, por lo que las especificaciones de las instalaciones no son tan exigentes. A su vez, son más frecuentes en las regiones en vías de desarrollo, ya que persiguen la implantación de políticas verdes sin comprometer el desarrollo, especialmente si las fuentes disponibles y más accesibles son convencionales.
Los mercados voluntarios están vinculados con los mecanismos de desarrollo limpio. Dichos mecanismos fueron propuestos durante la aprobación del protocolo de Kioto con el objetivo de mantener el equilibrio y acceso al desarrollo energético en todas las regiones. Su funcionamiento se centra en el comercio de derechos de emisiones entre proyectos o ejecución de planes de obra.
Uno de los ejemplos más habituales es la transferencia de las emisiones al construir una central basada en energías renovables. La sociedad propietaria de dicha instalación puede vender las emisiones diferenciales entre un sistema convencional y el nuevo a ejecutar a otra región en vías de desarrollo para subsanar las barreras energéticas existentes y promover el desarrollo sostenible.
El profesional y su papel en el cuidado ambiental
En la actualidad el desarrollo sostenible juega un papel crucial en nuestras vidas. Por esta razón muchos profesionales de diversas áreas se han enfocado en solucionar problemas relacionados con ello. Además de incluir en sus conocimientos lo relacionado con temas eco ambientales de manera que puedan aplicarlos de manera óptima en su labor.
TECH Universidad Tecnológica es una universidad comprometida con las labores sociales. Por ello, muchos de sus programas dentro de su Facultad de Ingeniería se enfocan precisamente en este ámbito. Casos como el Máster en Industria 4.0 y Transformación Digital y el Máster en Generación Eléctrica, Promoción, Tecnología y Explotación promueven estas técnicas e ideologías.
A pesar de que estos programas tienen fuerte relación con el desarrollo sostenible, ninguno de ellos se acerca tanto a la temática en general, como el Máster en Energías Renovables.
