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Los sistemas educativos han sufrido reformas continuas durante las últimas décadas. Pero esto ha sido más sobre el papel que sobre el terreno, porque poco han cambiado las pláticas reales del aula y del centro. La escuela contemporánea sigue pareciendo una institución acomodada más a las exigencias del siglo XIX que a los retos del siglo XXI. Esta problemática esta en manos de toda la estructura organizacional de la educación, sin embargo es posible que los profesionales de la educación sean el motor de cambio desde las aulas.
Existe un claro desajuste entre los rígidos y obsoletos modos habituales de enseñar en la escuela y las exigencias cada vez más complejas y cambiantes en vida contemporánea. La capacitación de docentes y su desarrollo profesional son un ejemplo privilegiado de este desequilibrio.
No se han producido cambios de forma alguna en la capacitación de los docentes de educación secundaria desde la transición a la democracia, hace más de treinta años. Se han mantenido en una tradición que condenaba estos docentes a la improvisación profesional, y a la angustia y el malestar que provocan la carencia de las competencias requeridas para el desarrollo de su función en una realidad cada vez más compleja, incierta y exigente.
Innovación educativa en el profesorado
Como bien dice Pérez Gómez, la preparación del profesorado ante estas exigencias, requiere una transformación radical de los modos tradicionales de capacitación. Para provocar acompañar, estimular y orientar el aprendizaje de todos y cada uno de los ciudadanos a lo largo de toda su vida, se necesitan profesionales expertos es unos respectivos ámbitos del conocimiento y al mismo tiempo comprometidos y competentes.
¿Qué se entiende por innovación educativa?
La innovación educativa, utilizada como sinónimo de renovación pedagógica. Este es un concepto complejo y polisémico como lo son los de calidad educativa o libertad de enseñanza que se presta múltiples lecturas interpretaciones. Aquí no se entiende como un conjunto de ideas, procesos y estrategias, más o menos sistematizados. Mediante las cuales se trata de introducir y provocar cambios en las prácticas educativas vigentes.
La innovación no es una actividad puntual sino un proceso. Un largo viaje que se destina contemplar la vida en las aulas, la organización de los centros y la dinámica de la comunidad educativa. Su propósito, es alterar la realidad vigente, modificando concepciones y actitudes, alterando métodos en intervenciones y transformando, según sean los casos, los procesos de enseñanza-aprendizaje.
La innovación, por tanto, va asociado al cambio y tiene un componente ideológico, cognitivo, ético y afectivo. Porque la innovación apelar a subjetividad del sujeto y al desarrollo de su individualidad, así como la relaciones teoría-práctica inherentes al acto educativo.
Innovación y reformas en la educación
La innovación no va asociada necesariamente a la reforma al menos por dos motivos; porque el ámbito de la reformas de carácter macro y afecta al conjunto del sistema educativo y el de la innovación es micro y se mueve en el ámbito más reducido y localizado del aula, la escuela o la comunidad educativa; y porque muchas reformas, en sus intenciones y más aún en su aplicación generalizada, no siempre esta en estimular la innovación sino que muchas veces incluso la ignoran, la paralizan, la dificultan o la torpedean.
Tampoco la innovación tiene que ver necesariamente con la modernización de la escuela. Modernizar, no supone automáticamente cambiar el estatus y la calidad de vida en las familias ni en las escuelas. Lo mismo puede decirse de los nuevos textos escolares. De muchas actividades que se realizan fuera de la escuela con el pretexto de salir del aula para conocer y hasta investigar el entorno.
Innovación didáctica
Aunque las comparaciones y clasificaciones son siempre necesariamente esquemáticas, se piensa que si pueden establecerse hoy por hoy algunas diferencias apreciables. Todo esto entre un enfoque conservador de la innovación educativa y otro progresista; lógicamente, ni uno ni otro se dan en la práctica en estado puro y lo que más abunda son las mezclas y combinaciones de ambos. Se trata de fomentar una educación integral de la infancia y la juventud. Que se logre que el alumnado aprende a conocer, actuar, hacer y convivir, con los cuatro pilares básicos de la educación.
La utilización del término innovación se adopta, con el fin de resaltar la relevancia ética que cualquier propuesta de cambio. Entendido para innovación didáctica, el vocablo se empareja con la introducción de algo percibido como nuevo por los destinatarios. Sin embargo, innovación es un concepto controvertible, como todos los que aluden a asuntos complejos.
Con el uso del término innovación se ha querido, hacer referencia solo aquellas prácticas de las escuelas, inspiradas en iniciativas que incorporan en sus planteamientos y el subdesarrollo una finalidad de mejora personal y colectiva, éticamente solidaria y justa para todas las personas previsiblemente afectadas. El uso de este término permite, además, acercarse a mejorar la comprensión del cambio referido a las prácticas escolares frente a una concepción más general de cambio y reforma que afectaría a todo el sistema educativo.
Innovación educativa como factor de cambio
Por otra parte, hablar innovación ayuda focalizar más el componente personal, racional y emocional de los cambios en educación.
Es decir, facilita el análisis de las actitudes de los profesionales de las organizaciones, su compromiso interno, los componentes utilizados para su desarrollo profesional. Se aleja de la visión más racional y burocrática de los cambios, promovida generalmente desde la creencia en la viabilidad del liderazgo coercitivo, cuando los docentes se sitúan más en una concepción cercana a entender el proceso del cambio y la innovación más como un estado mental o actitud que como una acción frenética.
El concepto innovación educativa es polisémico. Por encontrarse unido a las distintas concepciones que, en los últimos tiempos, se han venido laborando acerca de cómo promover las reformas en educación. La innovación, como preocupación y práctica, en educación surge desde el momento en el que los profesionales han incorporado en sus actuaciones el deseo de mejora.
Este método de entender el cambio de educación y el desarrollo de innovaciones en los centros, sigue actualmente vigente y fundamentar las más recientes reformas.
El cambio de rol del docente
Abordar el problema de la identidad profesional o de las identidades profesionales de los profesores, según una perspectiva internacional comparativa es una empresa compleja y, por decirlo todo, arriesgada. Efectivamente, a menos que se reduzca la identidad solo a sus dimensiones sociológicas e intraindividuales, es claro que esta se conjuga estrictamente con los sistemas sociales y escolares en los que obran los profesores.
Ciertamente, incluso si su trabajo comporta puntos en común, un profesor ya sea del país que sea, tiene identidades muy diversas, porque estas están marcadas por su cultura, su lengua, las tradiciones escolares propias a su país, etc.
¿Cómo llevar la innovación educativa a la práctica?
El educador moderno ha conseguido, bajo diferentes técnicas, llevar diferentes metodologías, para así ajustar los procesos de aprendizaje de los diferentes alumnos a la práctica. Todo esto con el fin de brindar mejores resultados a sus aprendices y a su profesión.
El aprendizaje es una necesidad constante del ser humano, y debido a esto, los educadores deben estar capacitándose constantemente. Esto brinda una mejora notable tanto para el profesional como para su alumnado. TECH Universidad Tecnológica conoce las necesidades del mercado. Es por esto que diseñó la Facultad de Educación, en donde es posible hallar especializaciones enfocadas en alta calidad. Ejemplos claros son el Máster en Flipped Classroom y el Máster en Formación del Profesor de Lenguas Extranjeras (Inglés) en Educación Secundaria.
Por otra parte, el Máster Enseñanza del Latín y Cultura Clásica brinda herramientas al profesional con el fin de que este logre especializarse de manera rapida y efectiva en tan solo un año.
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